Sabemos que el sistema educativo español necesita unos alicientes que le convierta en un sistema eficiente, y somos conscientes que depende directamente de la calidad de sus profesores. A diferencia de otros países, en España, la figura del profesor se está convirtiendo en una profesión que está perdiendo prestigio. También es cierto que hay docentes que no tienen vocación para enseñar. Sin embargo, y por suerte, todavía contamos con muchos, y muy buenos, docentes que viven la docencia con pasión y vocación.
Lo que hoy por hoy vivimos en los Colegios e Institutos es una creciente desaprobación del sistema educativo lo que demuestra que algo está fallando. Los alumnos denuncian acoso y persecución por parte del profesorado y de sus compañeros; los padres, reprochan la conducta de sus hijos y la actitud del Colegio; y los profesores, achacan a los alumnos la falta de obediencia, de respeto y las pocas posibilidades que se les brinda el sistema para tener una formación continua.
Además, esta dificultad se acrecienta en el caso de los Directores de Centros, Jefes de Estudio y Tutores que compaginan su labor docente con la de dirección, la gestión de personas y la resolución de conflictos.
Nadie está contento y gastamos nuestro tiempo y fuerzas en buscar culpables, sin investigar recursos que nos ayude a salir de éste enredo. Dependerá de nosotros el que queramos cambiarlo .. ¡¡y podemos hacerlo¡¡
Si queremos conseguirlo debemos desarrollar habilidades que permitan contribuir a mejorar el rendimiento escolar de los estudiantes y el nuestro personal, formulando por nosotros mismos, soluciones a los problemas. Con ello incrementamos la productividad de nuestras acciones y nuestro bienestar personal.
Para ver resultados, no podemos dejar en manos de otros la solución a nuestros problemas. Somos nosotros, cada uno de nosotros, quienes tenemos que tomar parte y ser protagonistas de nuestra historia. En el momento que nos sentimos parte del problema, comprendemos que somos parte de la solución.
Tenemos la obligación la sociedad, en general, y los padres y educadores, en particular, de motivar a los alumnos y ofrecer herramientas para desarrollar todo el potencial que, las personas, llevamos dentro. A través de la formación en Habilidades, concretamente a través de Coaching. ¡¡ Somos capaces ¡¡
Aprender a conocerse nos permite profundizar en las competencias que tenemos y ésto a poder y/o querer ejercitar las habilidades que las transforman en hábitos. Ser capaces de pasar de un estado de incapacidad, de estancamiento, a un estado de acción, desarrolla el potencial de la persona y la transforma a ser un sujeto proactivo. Entonces, comprobaremos que existen otras posibilidades que nos abrirán puertas o salidas a nuestros problemas.
Somos responsables de nuestro crecimiento como personas, y como educadores y padres, … del crecimiento de otros que confían en nosotros.
Formo parte de un grupo de Coaches[1] que ponemos a disposición de los Centros Educativos y los Centros de Formación de Profesores, herramientas que nos ayudan a ser efectivos en nuestro trabajo, superando las múltiples limitaciones que nos auto imponemos y deshaciendo creencias que llevamos arraigadas como credo de nuestras acciones.
Mediante el Coaching nuestro desarrollo como personas, se trasformará a mucha más velocidad de lo que podamos hacer nosotros sin estos conocimientos. Esto se produce por la intervención del Coach. Es lo mismo que ocurre en una reacción química en la que la presencia de un catalizador hace que aumente la rapidez del proceso químico, sin llegar a formar parte de los resultados del mismo. El coach acompañará en el proceso pero no intervendrá ni dará consejos, ni soluciones a nuestros problemas. Nos servirá de reactivo para llegar a nuestro objetivo. Seremos capaces de encontrar soluciones y hacerlo en un tiempo record.
Nuestra tarjeta de identidad, como coaches comprometidos con la Educación, es el obsequio que nos ofrecen nuestros alumnos con sus comentarios a estos cursos. Y éstos son algunos de ellos:
“Me apunte sin tener intención de terminar el curso, porque soy muy escéptico. Reconozco que he aprendido mucho que desconocía de mí, me lo he pasado bien, y me voy mejor de lo que vengo cada día, me ha enriquecido, me ha enseñado a ser más humilde …”;
“Me ha enseñado, lo veo desde otro punto de vista, hay ventanas que se abren y se cierran. Necesito que continúe. Esto sería de gran aplicación para el alumno-mediador, demandamos formación para ello”.
“Es, con creces, el curso que más me ha gustado de los cursos que he hecho para profesores, sales mejor de lo que entras. Se me ha pasado el tiempo volando”.
Estas manifestaciones nos hacen sentirnos orgullosos de nuestro Proyecto Educativo, orgullosos de saber que lo que un día fue una idea, hoy es un triunfo. Por ello, a todos los que habéis confiado en el Coaching, ¡ENHORABUENA! Y a todos los que nos habéis dado la oportunidad de compartir estas herramientas de Coaching, ¡GRACIAS!. Todos somos capaces de hacer lo que deseamos, si creemos firmemente en ello.
Esta es la auténtica revolución en las Aulas .. ¡¡somos capaces!!